Mucho será dicho acerca del Bicentenario en los próximos días.
Ni sociólogo ni politólogo, historiador o analista social, no quiero entonces opinar inadecuadamente sobre lo que me excede y no entiendo.
Mi especialidad es el trabajo uno por uno, y con pequeños grupos.
Pero participé como argentino de un fin de semana de celebración, sentí y pensé cosas.
Desde mi subjetividad puedo decir algo, con la advertencia de no pretender elevarlo a un nivel científico.
Observé mucha paz en la celebración, no vi violencia, luchas ni vandalismos entre sectores, no hubo vidrios rotos ni encontronazos entre grupos políticos opuestos.
No hubo tampoco busqueda de aprovechar la situación para continuar la pugna política e ideológica entre dirigentes, al menos no en gran escala.
Hubo millones de personas que se desplazaron para celebrar, y que mantuvieron sus diferencias sin colisionar.
El festejo del Colón para la clase alta y erudita, coexistió con el mas popular de Folklore en el Obelisco, apenas a pocas cuadras de distancia. Al mismo tiempo.
Ambas propuestas se realizaron en un nivel alto de calidad artística y técnica, organizados y sin accidentes. En mi caso, disfruté de ambas puestas ( la popular y la erudita), disfruté de un poco de ópera (que no entiendo), y del folcklore y el tango ( tal vez tampoco entienda pero siento mas cercano y familiar).
¿Empezaremos a poder estar juntos a pesar y con nuestras diferencias?
Me vino a la boca la palabra "together" ( estar juntos) que deriva del antiguo " to gather" (acción de encontrarse). Re-encuentro...
En el "gathering" hay un encontrarse sin perder las diferencias. Diferentes se acercan sin fusionarse , sin mezclarse ni confundirse.
Co-existen...
Es un nivel mas alto que la masa, porque no hay pérdida de identidad, sino aceptación del otro como distinto, sin necesidad de subsumirlo ni de destruirlo.
Quiero pensar ( no digo que sea así) que presencié un síntoma social nuevo, el primero de un nuevo período. No creo que lo vaya a ver acabado en vida, pero me gustaría ser parte en el proceso de construirlo, desde mi humilde lugar, como guía de personas que buscan mejorarse a sí mismas, que interaccionan y se enriquecen con sus diferencias, que se potencian y salen de nuevo a la Argentina de cada uno, para hacer la pequeña gran diferencia de todos los días.
Levanto mi copa, por la construcción colectiva de una nueva argentinidad!
LC